El barco fue entregado a la firma completamente desmantelado y un año después ya está listo para navegar. “Fue un trabajo intenso en el que prácticamente construimos un nuevo barco” relató Marcelo Mou, presidente Red Chamber Argentina.
En plena pandemia y mediante un trabajo intensivo, Red Chamber Argentina reconstruyó a nuevo el buque Cabo Vírgenes, que hace poco más de un año estaba completamente desmantelado, corroído y sin condiciones de navegabilidad.
La empresa recompuso el 100 por ciento del casco y la cubierta; reparó el motor propulsor a cero; instaló nuevas bombas hidráulicas y reemplazó tuberías, válvulas e iluminación. Reconstruyó camarotes, baños y comedor e instaló nuevos equipos electrónicos de navegación, detección y comunicaciones.
También colocó un nuevo equipo de mantenimiento de bodega, reparó la máquina de hielo y presentó ante Prefectura Naval Argentina los elementos técnicos para verificar la aptitud del buque, los cuales ya fueron aprobados.
“En total reemplazamos más de 50 toneladas de acero y sustituimos el 80 por ciento de las instalaciones eléctricas del buque que habían sido robadas, al igual que los motores, cables y mobiliario” detalló el presidente de RCA, Marcelo Mou.
El astillero TPA fue el encargado de “construir un barco prácticamente nuevo” explicaron, ya que el Cabo Vírgenes permaneció siete años abandonado en el puerto de Mar del Plata, donde fue completamente saqueado.
45 millones de dólares para recuperar los barcos hundidos y la planta
Con el objetivo de recuperar la flota corroida que perteneció a Alpesca, Red Chamber Argentina consiguió que el Promarsa III vuelva a pescar, recicló completamente al desmantelado Cabo Vírgenes y comenzó a reconstruir el Promarsa I, que actualmente se encuentra en dique seco donde se le están realizando las primeras reparaciones.
En octubre del año pasado la compañía firmó un acuerdo con Cancillería Argentina y Tandanor para invertir un total de 45 millones de dólares en la construcción de dos nuevos barcos pesqueros, que reemplazarán a los buques hundidos en la costa de Puerto Madryn. El plan también contempla la reparación de la planta de procesamiento.
“Hoy nuestra empresa da trabajo a más de 400 personas en relación de dependencia y confiamos que los barcos que volverán a navegar dinamicen aún más la industria y sumen valor agregado a la Patagonia” finalizó Mou.