La caza de ballenas Minke (Rorcuales Minke) en Noruega continúa a pesar de las críticas de científicos, organizaciones medioambientales y activistas que consideran que viola los derechos de los animales.

Al menos 575 ballenas murieron durante la temporada de pesca de este año, el número más alto en los últimos cinco años, según un informe de la Organización de Ventas de Pescadores de Noruega.

En declaraciones a la Agencia Anadolu, Vanessa Williams-Gray, una de las principales activistas de Whale and Dolphin Conservation (WDC), dijo que la caza de ballenas es una «masacre ambiental» y calificó de «imperdonable» la matanza de cientos de ballenas Minke.

La matanza de estas ballenas ocurre pocos días después de que se sacrificara el mayor número de delfines y ballenas en el archipiélago de las islas Feroe, en Dinamarca.

Según el Ministerio de Pesca de Noruega, la cantidad de ballenas que se matará este año asciende a 1.278.
WDC también compartió con la Agencia Anadolu los resultados de una encuesta realizada conjuntamente con la organización de derechos de los animales más grande de Noruega, NOAH, y el Animal Welfare Institute (AWI).

La encuesta demuestra que un aumento en el número de ballenas pescadas este año no beneficiará a la industria ballenera del país nórdico.

El estudio también encontró que la proporción de noruegos que dijo consumir carne de ballena con frecuencia fue del 4% en 2019, en comparación con el 2% de este año.

A pesar de las críticas, los funcionarios del Gobierno noruego describen la caza de ballenas como «algo normal».
Odd Emil Ingebrigtsen, ministro noruego de Pesca, sostiene que las ballenas son una buena fuente de alimento, y vincula la caza de ballenas con el uso de recursos naturales.

Noruega también ha sido severamente criticada por sus «métodos salvajes» de caza de ballenas y por ocultar estos métodos.

En Noruega, las ballenas todavía son pescadas mediante arpones con explosivos que penetran los mamíferos marinos unos 30 centímetros y explotan dentro del animal.

Es más fácil arrastrar a la ballena hacia el barco con arpones clavados en su carne. El 18% de las ballenas muere con un dolor agonizante de 15 minutos debido a esta forma de pesca.

Desde 1993, más de 9.500 ballenas Minke han muerto en Noruega.

La pesca mundial de ballenas está regulada por la Comisión Ballenera Internacional (CBI), establecida en 1946 para conservar las ballenas.

Noruega e Islandia continúan pescando ballenas a pesar de que la CBI mantiene una moratoria sobre la pesca comercial de ballenas emitida en 1986.

Ambos países nórdicos han objetado oficialmente dicho moratorio y han establecido sus propias cuotas de pesca.

Fuente: AA