Hundimiento del quinto barco del parque submarino
El parque submarino de Las Grutas es el más grande de Sudamérica y único en el mundo. “En noviembre ya estará lleno de vida, como pasó con las otras naves” dijo Sebastián Leal, el buzo profesional que integró el operativo. Aquí comparte el relato y su impresionante registro con un drone y con una cámara en el propio buque.
Diez horas demandó el operativo que terminó con el Magdalena María II (ese barco que supo ser un activo pesquero) en el fondo del mar, convertido en un nuevo atractivo del parque submarino de Las Grutas, que es único en el mundo.
“Los últimos barcos sumergidos están preparados para ser recorridos por dentro. Hay lugares dónde se pueden visitar barcos y meterse en ellos, pero provienen de naufragios. Estos son los únicos que fueron acondicionados para ese recorrido” dijo Sebastián Leal, el buzo profesional que integra la firma Cota Cero Buceo, que es la que ideó el proyecto.
“Arrancamos muy temprano, porque lo primero que había que hacer era remolcar el barco. A mí me tocó ir arriba del Magdalena María II, porque había que controlar que no hubiera contratiempos. El remolcador Viento y otras naves de apoyo estuvieron en este tramo. Tardamos dos horas y media en llegar a Las Grutas” contó Sebas.
Una vez en el balneario llegaron a la zona donde se realizaría el hundimiento, a la altura de Piedras Coloradas. “Ahí nos esperaban unos biólogos que ya habían descendido para ver el lugar en el que quedaría el barco” dijo el buzo.
Recién allí comenzó la fase de hundimiento. El buzo Marcos Guirao y la firma de buceo El Austral tuvieron un rol clave, ya que comenzó la tarea de llenar el Magdalena de agua para lograr que la maniobra se diera de manera equilibrada. “Tenía que estar ‘adrizado’, es decir, derecho, para que al llegar al fondo se fuera creando después, naturalmente, una ‘cama’, en un proceso que lo entierra y fija cada vez más” detalló Leal.
Para que el ingreso de agua fuera dinámico no sólo abrieron las zonas por las que habitualmente pasa el líquido en las naves, sino que también descubrieron esas perforaciones que le habían sumado para acelerar el proceso.
Seba Leal instaló una cámara en el barco que registró impactantes escenas del hundimiento.
“Nos quedamos arriba del barco hasta que estuvo con bastante agua. Después comenzó la otra parte, la de tirar el ancla y lograr que permaneciera en una buena posición. Para esa parte, esta vez, éramos varios. Fue mucha la fuerza que hubo que hacer” recordó el hombre.
La postal del barco desapareciendo mar adentro fue la más esperada. “Ahora estamos muy contentos. Prefectura realizará una inspección y seguramente habilitará la actividad deportiva, porque todo ocurrió perfecto” confió Leal.
Anticipó también que en tan sólo tres meses la estructura hundida se llenará de vida. “En noviembre ya se verá cubierto de vegetación marina e invadido de peces” expresó el buzo.
Además se alegró de que el proyecto del parque le diera nueva vida a buques que estaban sin operar, ocupando espacio en el pontón del Puerto San Antonio Este. “Ese pontón se liberó” se alegró Sebas.
El parque está a la altura de Piedras Coloradas, al sur de Las Grutas.
Queda a 7,4 kilómetros de la costa y los pesqueros están separados entre sí por una milla náutica, es decir por 1,85 km, lo que convierte el recorrido en toda una aventura.
La primera embarcación en hundirse fue el Don Félix, que llegó al fondo en 2007. Luego se agregaron los otros, en 2019 y 2020, respectivamente.
Con la última incorporación el arrecife artificial tiene 5 barcos. Es que el Magdalena María II compartirá la escena submarina junto con el Don Félix, el Mariana Rojamar, el Chiarpesca 59 y el Polarborg I.fuente Rio Negro.com.ar