El secretario general de la Asociación de Capitanes de Pesca, Jorge Frías, fue entrevistado en un medio de comunicación local para hablar respecto a la situación de los brotes de coronavirus en el sector pesquero. Indicó que «los casos se fueron acrecentando».

En cuanto a las tripulaciones afectadas con COVID-19, Frías comentó que fueron «40 barcos afectados, hasta ayer por la mañana». «La mayoría de los buques los capitanes no fueron afectados. Tenemos casos, de todas formas».

Así mismo el titular del gremio afirmó que están realizando todas las acciones respectivas para tratar de controlar la situación. Confirmó que hoy se reunirían con el secretario de pesca y agricultura de la nación y la expectativa es «juntarnos todos los actores nuevamente para analizarlo y encontrar soluciones».

En ese sentido, comentó que «estamos próximos a terminar la temporada del langostino que pone más dinámica a esta situación». «En los próximos días estaríamos finalizando en parte. El Consejo Federal Pesquero determinó que el 10 de octubre sale último despacho a las zonas de pesca dentro de la veda principal».

Frías asevera que «el Estado tiene que mediar aquí para que no haya enfrentamiento entre las partes. Los protocolos tienen que estar establecidos y así todos los sindicatos y las partes estamos en un mismo protocolo».

Respecto al alojamiento que se le debe prestar los marineros que estén atravesando la enfermedad, indicó que «sé que el subsecretario de Pesca de Nación, (Carlos Liberman), habló con Gustavo Sastre (intendente de Puerto Madryn) para solucionar este tema».

«Hicimos un relevamiento de los compañeros con propiedades para resolver esta situación: dúplex, departamentos, casas y poder disponer de otros espacios» puntualizó.

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