Walter Giménez, el capitán del Argenova IV, el buque que desde el domingo permanece amarrado el sitio 1 de Puerto Rosales, Bahía Blanca, le da las gracias a la empresa, al SOMU, y a sus compañeros por el aguante, confirma que la tripulación ahora se encuentra bien, pero que también se vivieron momentos de desesperación.

“Salimos de Deseado después del temporal, no tuvimos contacto con nadie, no nos bajamos del barco, y los tres relevos que subieron tenían dos testeos y habían cumplido la cuarentena en el hotel”, contó Giménez a Mar&Pesca.

El capitán recordó que en la mañana del tercer día de pesca en el paralelo 41º cuando se disponían a largar las redes un tripulante se presentó en el puente y le dijo que algo pasaba que había perdido el gusto y el olfato.

“Inmediatamente me comuniqué con la empresa y se puso en marcha un protocolo con consultas con una médica epidemióloga para monitorear la situación y me dijo que espere la evolución para confirmar que realmente se trataba de Covid, pero al día siguiente se presentó otro tripulante con los mismos síntomas, y al cabo de unas horas la situación ya era generalizada, comenzaron con diarrea, dolor de cuerpo, dolor de cabeza y picazón en la garganta, fiebre no tenían pero mi preocupación era grande porque había un muchacho asmático y mi miedo era que tuviera problemas.

Entonces al analizar la situación me decidí por el puerto de Bahía Blanca porque sabía que Madryn estaba con varios buques en la rada con tripulaciones con síntomas, y Deseado estaba lejos y no tiene infraestructura para atender si algún caso se llegaba a agravar entonces consideré que Bahía blanca era la mejor opción”.

Aunque antes de llegar a la rada de Bahía Blanca, Walter detalló que hubo algunos inconvenientes porque el Consorcio no quería recibirlos.  “Ahí comenzaron las conversaciones entre la empresa y el consorcio pero gracias a la intervención del subsecretario de Pesca, (Carlos Liberman ) que estuvo siempre al pie del cañón, pudo destrabarse y llegamos a rada donde nos hicieron los hisopados que salió positivo para casi todos salvo dos muchachos. Y con el diagnostico confirmado se aceptó que el barco atracara en el sitio 1 de Puerto Galván, y ahí subió el médico que era lo mas importante, por lo que habíamos peleado.  El médico nos revisó y nos dijo que teníamos los síntomas leves del Coronavirus y eso fue tranquilizador porque algunos tenían dolores y agotamiento y eso me preocupaba”, señaló al relatar la situación vivida.

De todos modos, el capitán del Argenova aseguró que una vez en puerto y con la visita del médico se sintieron mejor. “Los ánimos cambiaron en el puerto nos sentimos mas seguros porque la empresa contrató una ambulancia que está las 24 horas al pie del barco y el médico nos visita diariamente así que estamos aquí trascurriendo esta cuarentena juntos y la gente un poco más animada sabiendo que esto va a pasar pronto”, dijo por último.