China anunció que prohibirá temporalmente a su flota pesquera, la mayor del mundo, capturar calamar en algunas partes del Atlántico el Pacífico donde la sobrepesca llevó a esas poblaciones al borde del colapso.
El gigante captura hasta el 70% de los calamares del mundo, y sus barcos llegan hasta África Occidental y América Latina.
Pero los buques chinos suspenderán sus operaciones en las principales zonas de desove del calamar en el Atlántico suroccidental, cerca de Argentina, desde el jueves hasta el 30 de septiembre, y en partes del Pacífico desde septiembre hasta noviembre, dijo el lunes el Ministerio de Agricultura.
La prohibición se produce a raíz de la reacción internacional contra la gigantesca flota china de ultramar, acusada de sobreexplotar y dañar los frágiles ecosistemas marinos.
Las zonas cubiertas por la moratoria son zonas de cría de dos de las variedades de calamar más populares: el calamar de aleta corta argentino y el calamar de Humboldt.
Las poblaciones del calamar de aleta corta argentino fueron bajas en los últimos años. El promedio de capturas de los buques chinos en el Atlántico suroccidental fue de solo 50 toneladas en 2019, en comparación con hasta 2.000 toneladas anteriormente, según la asociación de pesca de calamar de China.
«China es el mayor consumidor de calamar del mundo y la captura que se está agotando ha dejado a los responsables preocupados», dijo Zhou Wei, un conservacionista del ecosistema marino en Greenpeace China.
«Garantizar un suministro estable de marisco es importante para asegurar la seguridad alimentaria», añadió.
La flota pesquera de aguas lejanas de China cuenta con más de 2.600 buques, más de diez veces la de Estados Unidos. Casi un tercio se dedica a la pesca del calamar.
«Una prohibición de la pesca del calamar –incluso temporal– por parte de China es fundamental para la salud del océano, dado el gran tamaño de las capturas», dijo Zhang Jihong, un biólogo marino del Instituto de Investigación Pesquera del Mar Amarillo de China.
La industria pesquera china da trabajo a más de 14 millones de personas, y otros 30 millones dependen del pescado para su subsistencia.
Pero a medida que se agotan las poblaciones en su país, los pescadores chinos navegan más lejos y se vieron envueltos en disputas marítimas.
El año pasado, cientos de buques pesqueros chinos fueron vistos alrededor de santuarios marinos frente a Ecuador y las Islas Galápagos