En un hecho relevante, que va de la mano de recientes noticias en torno a la instalación, por parte de YPF, de una gran terminal petrolera en la zona de Sierra Grande la Legislatura rionegrina aprobó en primera vuelta, la modificación de la denominada Ley Lasalle, que prohibe el desarrollo de infraestructura para el transporte de crudo o gas desde las costas rionegrinas.

La aprobación fue votada el jueves pasado. Recibió 42 votos a favor, sólo la negativa de Pablo Barreno (FdT) y hubo 3 parlamentarios ausentes.

   En tanto, según el diario Río Negro, una delegación de ambientalistas que llegaron desde Las Grutas no pudieron ingresar en el recinto.

La medida permitirá la exportación de combustibles por los puertos ubicados en el Golfo San Matías y, en tal sentido, ya hay un proyecto de YPF para construir un oleoducto entre Vaca Muerta y Punta Colorada

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De acuerdo con La Mañana de Neuquén, el proyecto de ley presentado por el gobierno de Arabela Carreras, modificando la Ley Lasalle N° 3.308 (Ley de Hidrocarburos provincial) que data de 1999 y que “prohibía el desarrollo de infraestructura para el transporte de crudo o gas desde las costas rionegrinas”, fue modificado.

El artículo 15 del proyecto de la ley que fue aprobada en primera vuelta el jueves en la Legislatura rionegrina,  modifica el artículo 1º de la Ley M Nº 3308, la denominada Ley Lasalle.

“La antigua norma impedía la instalación de oleoductos o gasoductos y de terminales para carga y descarga de buques. Con la flamante modificación, el texto deja sin efecto la última parte, lo cual hace viable la millonaria inversión anunciada por YPF, entre otros proyectos. Río Negro también sueña con una planta de GNL en el puerto de San Antonio”, precisó.

 Qué dice la Ley Lasalle

La Ley 3308/99 (conocida como ley Lassalle, por el legislador sanantoniense Alfredo Lasalle, que presentó el proyecto) surgió a partir de la voluntad popular de rechazar, en 1995, un proyecto de YPF similar al que acaba de conocerse el viernes pasado.

La idea consistía en construir un oleoducto desde Puesto Hernández, Neuquén, hasta 15 kilómetros al sur de Las Grutas, donde una monoboya  conectada a un ducto submarino serviría como sitio de atraque de buques superpetroleros (de más de 300 metros de eslora de eslora).

“Transcurría enero de 1995 cuando la noticia, por su magnitud, fue tapa de los diarios regionales y luego aparecieron notas en los grandes diarios nacionales. Se hablaba de una inversión de 300 millones de dólares, el impulso a la industrialización de la región y la generación de nuevos puestos de trabajo”, recordó en enero pasado la Fundación Inalafquen.

La entidad ambientalista de San Antonio Oeste, señaló que en el inicio de la campaña electoral que elegiría nuevo gobernador, el candidato radical, por entonces legislador provincial, Pablo Verani, se expresó de inmediato a favor del proyecto porque transformaría a Las Grutas en el Comodoro Rivadavia rionegrino…

“Pero la reacción de los habitantes fue inmediata y contundente. Con el acompañamiento del Intendente Carlo Carassale y la Comisión Municipal de Ecología, vecinos e instituciones comenzaron a reunirse, a juntar datos sobre la actividad turística y pesquera, a solicitar por nota información veraz a las autoridades, a realizar actividades de comprensión y difusión sobre lo que podría significar una monoboya para carga de superpetroleros en un ambiente valioso y sensible, que apenas hacía dos años había sido declarado área natural protegida con el nombre de Bahía de San Antonio.

 “Mayoritariamente la comunidad privilegió las actividades de pesca y turismo así como la conservación del ambiente del cual dependen. El lema que los nucleó fue NO AL OLEODUCTO, GOLFO AZUL O GOLFO NEGRO”.

   Según Inalafquen, a principios de marzo de 1995 unos vecinos lograron llegar al escenario donde el presidente Carlos Menem presenciaba un acto en su visita a Carmen de Patagones y le entregaron en mano las 12.700 firmas obtenidas hasta ese momento, exigiendo que el proyecto se dejara de lado.

“El legislador Verani comprendió la decisión popular y desechando su inicial adhesión presentó un proyecto de ley que se convirtió en el mes de julio en la ley 2892. Su artículo 1ro:  «Prohíbese la instalación de oleoductos cuyas terminales de carga y descarga a buques petroleros pretendan instalarse en cualquier punto del Golfo San Matías».

«El golfo no se toca»

El día de la sesión no  dejaron entrar a la Legislatura a los vecinos que se oponen a cambios en la ley de hidrocarburos.

De acuerdo con el diario Río Negro, el jueves pasado les negaron el acceso a los referentes de organizaciones ambientalistas que viajaron temprano, para participar de la sesión en la que se está trató la modificación de la norma.

Ambientalistas en el acceso a la legislatura rionegrina. Foto Río Negro.

   “Pudimos organizarnos para viajar unos pocos, porque nos tomó por sorpresa la noticia de que hoy tratarían la modificación de la ley que prohíbe la actividad hidrocarburífera en nuestro Golfo San Matías. Pero nos dejaron afuera, no nos dejaron entrar. Por eso estamos acá, esperando una respuesta de nuestros legisladores”, dijo Alicia Calendino, una vecina de Las Grutas que integra una de las organizaciones ambientalistas de la localidad.

“Es un franco retroceso que quieran cambiar parte de esta ley. Podría haber derrames que perjudiquen nuestro entorno natural, que es el que sustenta actividades como la pesca, el turismo, y en el que vivimos todos” dijeron desde otros de los grupos que promueven la negativa.

   Además, cuestionaron la celeridad con la que se tratará el tema “quieren imponerlo entre gallos y medianoches” alegaron.

Sobre la prohibición del ingreso a los vecinos que quieren presenciar la sesión, el titular del cuerpo, Alejandro Palmieri (JSRN), alegó que todavía el acceso de público está prohibido por los protocolos anti-covid.

“En otras sesiones dejaron entrar gente. Evidentemente buscan dejarnos afuera de este debate y nosotros queremos saber qué los mueve a querer modificar con tanta rapidez una ley que nos protege a todos” dijeron los ambientalistas al diario Río Negro.

Fuente Argenports.com