El buque «Capitán Canepa» sufrió una «avería» este miércoles por la madrugada mientras se encontraba amarrado en la Base Naval de Mar del Plata, lo que provocó su hundimiento en el muelle, informó la Armada Argentina.

De acuerdo a lo que se informó oficialmente, el siniestro se registró esta madrugada en la escollera norte y afortunadamente el buque no tenía tripulantes, por lo que no hubo que lamentar heridos.

El personal del Servicio de Seguridad Ambiental y del Servicio de Salvamento de la Armada, se presentó en el lugar para adoptar medidas preventivas y evitar cualquier tipo de daño al ecosistema. Se aplicaron también los protocolos de seguridad para el personal que trabaja en el área.

«Capitán Canepa» durante muchos años funcionó como buque de investigación del Instituto Nacional de Investigación y Desarrollo Pesquero (Inidep) y era propiedad de la empresa Navaltec S.A.

La embarcación se encontraba a pocos días de ser hundida en el parque subacuático Cristo Rey, cumpliendo los requisitos exigidos para la elaboración del expediente de hundimiento controlado de buques inactivos ante la Prefectura Naval Argentina (PNA).  

«La situación está controlada. La Armada Argentina ha notificado a la Prefectura Naval Argentina, sede Mar del Plata, quien está interviniendo conforme a lo dispuesto», completaron.

Video: hundieron un nuevo barco en el parque submarino de Mar del Plata

El buque pesquero «Sirius» fue sumergido a mediados de julio para formar parte del parque submarino Cristo Rey, un arrecife artificial que fue creado hace apenas tres años para deshacerse de los barcos «chatarra» que se encuentran en el Puerto y dar forma a un nuevo atractivo turístico para Mar del Plata con la práctica de buceo. Tras pasar sus últimos años en la escollera norte, el barco ahora será hogar para las especies de arrecife que allí crezcan.

Para ello, «Sirius» fue sometido a trabajos de desguace, limpieza descontaminación e instalación de rejas de seguridad, bajo la atenta supervisión y control de Prefectura, durante dos años.

Lejos de tener un impacto negativo en el medioambiente, el navío rápidamente será colonizado por distintos organismos en cuestión de semanas y, al cabo de un año, habrá una comunidad biológica similar a la hallada en los fondos rocosos naturales aledaños, dominada por mejillones, anemonas e hidroides. Los numerosos micro-hábitas del barco sirven de refugio para peces arrecifales típicos de nuestra costa como turcos, meros y cocheritos.