Desde el Juzgado Civil y Comercial Nº 10 que lleva adelante el concurso preventivo de Loba Pesquera, autorizó el desguace y posterior hundimiento del pesquero “Sirius” en el Parque Submarino Cristo Rey.

Mariana Tonto de Bessone, titular del Juzgado, estimó entendible las circunstancias invocadas por la concursada, específicamente el peligro que entraña para el resto de los buques amarrados ante contingencias climáticas y las consecuencias dañosas que eso podría generar con perjuicios evidentes para la propia concursada y también para el resto de la flota, sumado a los costos que ocasiona el amarre del buque ante el consorcio portuario.

En marzo de 2021 desde Loba Pesquera habían informado al juez que entiende en la quiebra del plan de desguace y posterior hundimiento del Sirius que se había presentado ante Prefectura. Los trabajos para limpiar al buque, remover hidrocarburos y dejarlo en condiciones para el hundimiento los realiza el astillero De Angelis.

Ahora el trámite se acelera puesto que era uno de los requisitos para llevar adelante el operativo, para lo cual debía girarse un oficio al registro nacional de buques.

Loba Pesquera proyecta construir un nuevo buque tangonero en reemplazo del Sirius en gradas de SPI. Mientras tanto realizó una locación del buque Miss Patagonia de Pesquera Veraz, al cual le cedió temporalmente el permiso para realizar tareas de pesca y poder generar ingresos.

En el expediente de la quiebra hubo quienes se opusieron a la aprobación del desguace. La Dra. Flavia Verónica Abud, abogada de Profile Management, rechazó  el levantamiento de las medidas para el desguace y hundimiento.

La letrada argumentó que su representada todavía no ha sido desinteresada de su crédito y que debía garantizarse el crédito verificado por lo que le pidió a la Jueza que le exija a la concursada depositar los fondos para cubrir el mismo.

Loba Pesquera pidió que no se tenga en cuenta el reclamo de Profile ya que a la fecha no era acreedora de la empresa por no encontrarse ni firme ni consentida la resolución dictada en el incidente de verificación tardía.

La concursada le había pedido a la Jueza que autorice de manera urgente el desguace. Argumentó que existen deficientes condiciones de mantenimiento y que en uno de los últimos temporales el viento cortó los cabos de amarre, lo que provocó un peligro “inconmensurable” para el resto de los barcos. También especificaron que tenerlo amarrado en el muelle genera gastos ante el Consorcio por medio millón de pesos.

La jueza le dio la razón a Loba en los argumentos ante Profile al aplicar el artículo 56 de la Ley 24.522, el cual postula la aplicación a todos los acreedores; el acuerdo homologado produce efectos respecto de todos los acreedores quirografarios cuyos créditos se hayan originado por causa anterior a la presentación aunque no hayan participado en el procedimiento.

Se desconocen por ahora los plazos para realizar la maniobra de traslado y hundimiento del Sirius. Antes debe realizarse la maniobra con el pesquero Simbad, el barco que cedió su permiso para el fresquero Niño Jesús de Praga, de la empresa Ritondo-Salustio-Cicciotti.

Si bien hace un mes el buque está en condiciones de trasladarse y hundirse, a último momento desde Prefectura revelaron que faltaba un pequeño detalle: la baja en el Registro Nacional de Buques. La semana pasada ese trámite fue saldado y ahora esperan una ventana de buen tiempo para trasladarlo con los remolcadores y hundirlo a un par de millas de la costa, frente a las restingas del Faro de Punta Mogotes.

Fuente Revista Puerto