La protesta es porque a los tripulantes de los buques fresqueros de altura se les impide descender de los barcos hasta haber cumplido dos semanas de aislamiento a bordo, y consideran que la cuarentena la deberían hacer en sus domicilios, al tiempo que comparan que se han flexibilizado en la ciudad un gran número de actividades, pero sigue la rigurosidad en los protocolos portuarios.
Distanciamiento Social
El delegado gremial del SOMU en Comodoro, Osvaldo Garay, fundamentó el pedido en que “nosotros estamos igual que en fase 1 cuando en realidad la ciudad está liberada”, y citó como ejemplo que hay marineros que “hace dos meses que no ven a su familia. “El problema lo tenemos con los barcos colorados. No pueden vivir presos”, razonó al explicar los motivos de la manifestación que incluyó el impedimento de salida de colectivos, por algunas horas, como medida para visibilizar su reclamo.
El dirigente sindical solicitó el mismo trato que al resto de los trabajadores de otras actividades. “Pedimos los mismos derechos que la gente que está trabajando en tierra porque la ciudad está liberada”, insistió. En realidad, Comodoro Rivadavia entró en
Distanciamiento Social, Preventivo y Obligatorio (DISPO), pero no es menos cierto que por lo acontecido meses atrás con el brote de contagios originados en el puerto a partir de buques pesqueros es que se mantienen vigentes las medidas restrictivas ordenadas por la autoridad sanitaria provincial.
“No hay empresa ni nariz que aguante”
Garay señaló que “debido a los protocolos, la gente que sale a pescar cuando vuelve no puede desembarcar por catorce días, pero ese protocolo ya no sirve”, interpretó el sindicalista del SOMU. “Entiendo todos los protocolos, pero si la ciudad está liberada porque abren eventos, abren casinos, abren salones y todo el mundo se va a su casa y los marineros son de Comodoro y no tienen por qué quedarse a bordo porque todos tienen hisopados”, ahondó en la justificación del reclamo.
Respecto a las mareas de pesca, “ellos van y vienen en tres o cuatro días. Haciendo un hisopado por vez no hay empresa ni nariz que aguante. Pedimos los mismos derechos que la gente que está trabajando en tierra”, recalcó el delegado del SOMU en declaraciones a Radio del Mar.
Con diferente vara
El pedido de revisión de los protocolos sanitarios para la actividad portuaria comodorense obedece a que para otros sectores ya se han flexibilizado progresivamente. “Apelo al sentido común, tienen que modificarlo”, y sugirió “que les tomen la temperatura, que hagan la declaración jurada, como hicieron con la Flota Amarilla. Son los mismos barcos pintados de otro color”, comparó respecto de los fresqueros de altura que desde ese puerto operan.
“El problema lo tenemos con los barcos colorados y otros de los que no dejan salir a nadie. Dicen que embarca gente de afuera. Hay capitanes y maquinistas que no hay en Comodoro, que tienen que venir de afuera, pero cada vez que viene uno los encierran catorce días más. Hay gente que hace dos meses que no ve a su familia. Algunos incluso ya tuvieron el virus y de igual forma deben hacer el aislamiento”, mencionó.
“En el petróleo suben todos juntos en una camioneta y bajan también”, comparó el referente local del SOMU sobre los protocolos en la industria petrolera. Estamos en una demostración pacífica de justicia. No quemamos gomas, no rompemos nada”, aclaró.
FUENTE REVISTA PUERTO