Hasta la primera semana de noviembre se llevaban desembarcadas 8.453 toneladas cuando en todo 2020 la cifra fue casi de la mitad. El trabajo articulado entre empresas de servicios y el Consorcio explican el incremento.
En el tablero de puertos pesqueros, Bahía Blanca no tiene un rol protagónico, pero eso no indica que no muestre un crecimiento en relación a años anteriores donde directamente las descargas de productos pesqueros eran insignificantes.
Con un trabajo articulado entre empresas de servicios, operadores privados, sindicatos y la administración portuaria, el puerto bahiense registra un significativo aumento en el movimiento de pescado recibido en su terminal.
Puerto Frío es el operador logístico para la carga pesquera y desde donde se elaboró un informe estadístico que marca el crecimiento de la actividad en lo que va del año. Hasta el 5 de noviembre se desembarcaron en Bahía Blanca 8.453 toneladas de productos de origen marino. En todo 2020 habían sido apenas 4.878. En 2019 las descargas pesqueras solo habían alcanzado las 1.695 toneladas
“Es el resultado de una estrategia para recuperar la actividad pesquera que hemos venido desarrollando desde hace tres años y en la que se han alineado a todos los actores para prestar un servicio ágil y eficiente y los barcos no sufran demoras en la operatoria”, ponderó Walter Ottavianelli, directivo de Puerto Frío ante la consulta de este medio.
Puerto Frío lleva quince años en el puerto bahiense. Se han especializado en el proceso de pre-enfriado, congelado, conservación y consolidación de cargas tanto secas como refrigeradas. En este contexto las cargas pesqueras suman protagonismo.
El industrial destacó el rol que cumplen todos los sectores, pero agradeció “fundamentalmente a los trabajadores de la estiba, Aduana, SENASA y el Consorcio Portuario para que el sistema funcione coordinadamente y se pueda generar mayor actividad con la consiguiente generación de más empleo”. Las 8.453 toneladas demandaron el pago de 39.158 jornales de seis horas de trabajo en la estiba.
El comparativo que refleja la evolución de las descargas pesqueras en Bahía a lo largo del año, mientras en los años anteriores se observa cierta irregularidad, con meses en los que directamente no hubo ningún movimiento, en este 2021 se observa una actividad regular, salvo enero, con ingresos de buques pesqueros en todos los demás meses del año.
Las tres principales empresas pesqueras que descargan parte de sus capturas en Bahía Blanca son Argenova, que aporta el 58% de las descargas totales que contabiliza el puerto, Iberconsa, cuyos desembarques representan un 29% y Pesquera Santa Cruz, que aporta el 13% restante.
“Este año creo que el crecimiento también se explica por el protocolo covid que pudimos presentar a las empresas para el cuidado de las tripulaciones. Ese método de trabajo generó mucha confianza en los armadores y fomentó la operatoria, trabajamos mucho más de lo que esperábamos”, explicó Ottavianelli quien proyecta para 2022 un movimiento de 12 mil toneladas desembarcadas por la actividad pesquera.
Los operadores no solo van a seguir trabajando para incrementar el movimiento de los desembarques, sino que acentuarán las gestiones para que la materia prima se exporte por el puerto bahiense. Apenas el 24% (65 contenedores) de lo que se descargó se exportó por Bahía. El resto (202 contenedores) salió por otras terminales, principalmente las porteñas. FUENTE :REVISTA PUERTO