En medios de prensa locales se publicó que la empresa responsable del dragado ha solicitado la rescisión del contrato y el Secretario de Pesca, Gabriel Aguilar, había expresado su comprensión hacia la decisión tomada por la empresa, ya que la provincia hizo todos los esfuerzos posibles para asegurar que la obra se llevara a cabo.

Sin embargo, el ministro de Infraestructura de la provincia, Gustavo Aguilera, desmiente las afirmaciones del Secretario de Pesca respecto a una posible rescisión del contrato. Aguilera, afirma que la obra solo se encuentra detenida por una medida judicial y las autoridades están trabajando en busca de soluciones para superar los obstáculos legales y económicos que enfrenta el proyecto.

El ministro de Infraestructura reiteró que la principal razón de la paralización de la obra es una cautelar impuesta que prohíbe el dragado hasta que se obtengan los resultados de las muestras tomadas por Fiscalía. Actualmente, dichas muestras se encuentran bajo análisis en el CENPAT (Centro Nacional Patagónico) para realizar los correspondientes monitoreos. Aguilera aseguró que desde abril del presente año se han presentado estudios respaldando la autorización del dragado, pero que “lamentablemente la Jueza a cargo del caso aún no los ha tenido en cuenta”.

Rescindir el contrato tendría implicaciones económicas significativas para la provincia, expresó Aguilera, el  ministro de Infraestructura  de la provincia, pues la empresa no ha presentado una causa justificada para tomar esa decisión. Además, cualquier reformulación del proyecto retrasaría la obra y podría inutilizar la draga por un largo período, lo que podría llevar a la empresa propietaria de la misma a asumir otros compromisos.

La empresa de dragado llevaba esperando desde noviembre pasado para iniciar la obra, que finalmente comenzó la semana pasada pero se detuvo tras pocos días de haber iniciado, debido al amparo ambiental presentado por el intendente de Rawson, Damián Biss.  El funcionario fue señalado por otros sectores, “de haber cedido ante la presión de algunos vecinos que se oponían al dragado, lo que ha generado frustración en el gobierno provincial ” .

Gabriel Aguilar, el Secretario de Pesca, hizo hincapié en que el sector pesquero ha enfrentado graves problemas para operar en la zona de la desembocadura, teniendo que ingresar “haciendo panza”, es decir, tocando con la parte inferior del casco el lecho del río. Esto ha tenido consecuencias negativas para la flota, afectando su funcionamiento y seguridad.

La obra continuará paralizada hasta que no se tengan los resultados de las muestras de los sedimentos y se defina legalmente si se puede reanudar el dragado.