El “Antonia D”, es un pesquero fresquero multipropósito que puede pescar tanto merluza y otras especies costeras, como langostino con tangón. Fue diseñado para pescar langostino, pero adaptable para la captura de especies costeras y de merluza fuera de temporada.

Con 24 metros de eslora y 7.80 de manga esperan botarlo sobre mediados/fines de este mes. Cuenta con una proa bulbo, diseñada para aumentar su eficiencia en el consumo de combustible.

Los datos técnicos de la construcción indican que posee un motor principal Yanmar, tres motores auxiliares Cummins y una hélice de proa Sleipner. Fabricantes nacionales han provisto el timón Buen Rumbo, las cintas transportadoras Be-Inox. La superestructura se encuentra montada en aluminio, el casco está construido en acero naval y tiene capacidad para una tripulación de hasta 13 personas.

Domingo Contessi – Presidente del Astillero – manifestó “estamos terminando los sistemas eléctricos y el equipamiento interior” lo que da cuenta de su inminente botadura.

El “Antonia D” forma parte de una línea de buques que el astillero ha basado en el prototipo 27 AC, que tiene una versión mejorada de su antecesor inmediato, el “Luca Santino”, botado en 2019.

Domingo Contessi, resaltó que hay contratos por seis arrastreros de las mismas características que se construirán en los próximos dos años para la empresa pesquera Dalian Huafeng, de propiedad china pero para su sede en nuestro país.

El buque es uno de los siete proyectos que se están construyendo actualmente en el astillero de Mar del Plata, y forma parte de una ola de renovación de la flota que comenzó en 2019 y que ha sido posible gracias a la abundancia de langostino y especialmente la decisión del actual gobierno de impedir la importación de buques usados.

El pesquero de la familia Di Bona, pasará toda la temporada de langostino en aguas patagónicas, pero luego operará desde el Puerto de Mar del Plata sobre otras especies.

A esta embarcación le seguirán otros dos buques de la serie 27 AC que actualmente están terminados en un 80%, y un barco arrastrero de 26.80 metros de eslora, similar al “Niño Jesús de Praga” que fue botado en abril de este año.

El año 2022 será un año de botaduras en el astillero que fundara Don Federico Contessi hace ya más de 70 años.