Las exportaciones pesqueras y los reclamos sindicales acapararon la agenda chubutense de la última semana. El responsable, dicho elogiosamente, fue Daniel Scioli, quien volvió a poner a la pesca en la primera plana con su visita a Puerto Madryn.

Sin embargo, mientras unos miran hacia Brasil y al reclamo del STIA por la desocupación fuera de temporada, en los sótanos de la actividad avanza una discusión que promete interesantes capítulos en el corto plazo. Y no tiene que ver directamente con el proyecto de la nueva Ley de Pesca. Sino en cómo se van moviendo las fichas de un tablero a donde la luz entra muy poco para ver lo que sucede. Estos son los permisos de pesca, la habilitación para explotar, ni más ni menos, que la segunda actividad más importante de la provincia detrás del petróleo.

La nueva ley se encargará de redistribuirlos. Pero aunque falte tiempo para ver cómo se resuelve, con un caladero que pide dejar de sumar más barcos, ya hay una certeza concreta: o serán más habilitaciones para dejar a todos contentos, o habrán devoluciones. Y en esa rifa, hay actores que ya apuntan a Red Chambers.

PEDIDO DE INFORME Y RESPALDO

El diputado principal Carlos Eliceche fue el primero en mover, con un pedido de informe sobre todo lo referido a la firma china. Pagos, canon, permisos, empleados, sueldos y demás. Pero no fue el “Ganso” sino el propio Secretario de Pesca, Gabriel Aguilar, quien con sus dichos desparramados en varias radios locales jugó en sintonía y dejó en manifiesto hacia dónde iba dirigido el latigazo a la empresa.

“Me parece acertado” hacer el pedido de informe porque “hay algunas críticas que le hacemos”, compartió Aguilar. Sostiene principlamente que “no hay certeza del cumplimiento del acuerdo”.

Para explicarlo enumeró ciertos puntos como la falta de pagos del canon por explotación, la no conformación de la comisión para revisar el acuerdo; que el gobernador aportó un cupo social de langostino para la incorporación de más trabajadores; que el Estado no podía pagar más subsidios, y la falta de entrega de información oficial sobre las nuevas incorporaciones. Recordó que en la gestión de Adrián Awstin en la cartera de Pesca, ya se le habían formulado diversas intimaciones a la empresa para el cumplimiento de las pautas. “Y siempre pedía algo más”.

Pero denunciar irregularidades de Red Chambers en el acuerdo con Provincia, es dejar el tiro corto respecto a donde verdaderamente se apunta. Que no son ni más ni menos que los 5 permisos otorgados para que la empresa se ocupe de resolver la desidia que dejó Alpesca.

Sin embargo, para exponer el verdadero trasfondo de la discusión, Aguilar puso por delante a la voz empresaria. Señaló que el tema Red Chambers es “delicado” porque “genera rispideces con el resto de la sociedad”, aclarando que “las otras plantas pesqueras que no tienen permiso de pesca entienden que hay un trato preferencial y que, según las diversas opiniones, no cumple del todo con los compromisos asumidos en ese famoso contrato que ya lleva unos buenos años”.

Claro que no es la primera vez que Aguilar dispara contra la firma china. Meses atrás subrayó que “Red Chambers está haciendo abuso de los permisos” . En otra ocasión cuestionó “por qué tienen 5 permisos de pesca e Iberconsa o Pescapuerta no tiene ninguno”.

En una Legislatura provincial donde faltan diputados que conozcan buena parte los despachos, Eliceche tuvo en Aguilar un interlocutor y colaborador importante en el plano discursivo.

Con la excusa de un reclamo sindical que no encuentra grieta, como es la desocupación en Chubut, llevó a los medios periodísticos el conflicto. Las frases empezaron a formar una especie de telón de fondo, como armadoras de un terreno sobre el que ahora la Legislatura tiene que discutir la nueva ley de pesca.

Ahora bien, los sindicatos que están en contra del proyecto ¿le están facilitando al Gobierno Provincial el camino para acelerar la discusión?

fuente redesalmar.com