“Si algo puede salir mal, saldrá mal”, es una de las leyes de Murphy que aplica casi a la perfección en la historia del buque de investigación científica Víctor Angelescu, que desde que llegó en 2017 a nuestro país proveniente de Vigo, España, donde se construyó, se ha roto demasiado seguido para el poco recorrido que lleva por estas latitudes relevando recursos pesqueros a lo largo y ancho de nuestra zona económica exclusiva.

Fuente La Razón de Chivilcoy

Después de estallar uno de sus generadores, la última falla que sumó a la colección fue la rotura de la bomba de lubricación de un cojinete de bancada del eje de propulsión. La bomba no levantó presión cuando el buque volvía de Montevideo y por ende, no lubricó. Sonaron las alarmas, el motor eléctrico se detuvo y se tuvo que remolcar hasta Mar del Plata.

A veinte días del incidente y con el buque amarrado en el muelle de la Base Naval, la semana pasada llegó la visita de mecánicos de Talleres Carmona, la empresa de Chivilcoy, quienes comprobaron que, al estar sin lubricación, el cojinete de bancada se había barrido.

Es uno de los cuatro cojinetes de empuje del eje de propulsión que tiene el Angelescu, que son lubricados por la bomba de aceite. La pieza fue barrida por trabajar en alta temperatura y sin lubricación. Fuentes consultadas aseguraron que no es automático que falle la bomba, suenen las alarmas y se barra el cojinete. “Para barrerlo hace falta que funcione un rato sin lubricación”, remarcaron.

El informe desde España lo debe entregar la empresa INDAR, que diseñó los motores eléctricos que lleva el Angelescu y accedió remotamente a su caja negra el miércoles pasado.  Desde INDAR quedaron en brindar el informe, aunque hasta la tarde del lunes 18 de julio, no hubo novedades.

Una vez autorizados a desarmar la bomba, según explicó el jefe de Armamento y Buques, en Chivilcoy, se evaluará el estado y futuro de los cojinetes. Sobre todo del dañado. “Veremos … si aceptan reparación se repararán y si no, se fabrican acá acorde al plantillado y planos”.

Anteriormente Latte había dicho que los cojinetes eran marca Renk y que existían repuestos en el mercado nacional. Si hay en el mercado uno nuevo de repuesto, se desconoce por qué deberían fabricarse en Carmona. ¿Es más barato, más rápido, ambas cosas? Esas preguntas hoy no tienen respuesta.

El tiempo de reparaciones y el costo que demandará, dependerá del trabajo que se tenga que hacer sobre el cojinete en Chivilcoy. Aunque las certezas reveladas recién llegarán cuando se sepa qué generó la falla en la bomba de lubricación.

El buque cuenta con la tecnología más moderna del mundo para la investigación en materia pesquera y ambiental. Desde su incorporación en 2017, la embarcación es utilizada para realizar campañas en todo el litoral marítimo argentino y habitualmente lleva a cabo cruceros científicos en la Zona Común de Pesca Argentino-Uruguaya.