La propia Prefectura Naval detectó la irregularidad, investigó y detuvo a dos de sus miembros por el caso, bajo la sospecha de que fueron sobornados. El hecho se dio el pasado 17 de marzo en el acceso al puerto de la ciudad. La víctima, también de nacionalidad china, estuvo cautiva cerca de tres horas hasta que quienes lo retenían advirtieron que se habían equivocado de persona. Días antes, preguntaban por una persona que presuntamente debía 70.000 dólares.
Apartir de una investigación del fiscal federal de la Unidad Fiscal Mar del Plata, Santiago Eyherabide, un ciudadano chino fue detenido acusado de haber privado de la libertad durante casi tres horas y por un presunto error, a un tripulante de un barco pesquero de su misma nacionalidad en el ingreso a las terminales portuarias. Por el hecho, ocurrido el pasado 17 de marzo, fueron apresados también dos efectivos de la Prefectura Naval Argentina (PNA), acusados de un posible soborno, circunstancia que fue advertida, informada e investigada por miembros de la propia fuerza federal.
A pedido del representante del Ministerio Público Fiscal y por orden del juez Santiago Inchausti, a cargo del Juzgado Federal N°1 de Mar del Plata, el lunes pasado se realizaron una serie de allanamientos en diversos comercios del centro marplatense y se concretaron las detenciones. Horas después, se materializaron ruedas de reconocimiento y las indagatorias. Un cuarto imputado fue liberado, tras establecerse una situación de homonimia.
El secuestro
El caso, investigado por la Delegación de Investigaciones de la Prefectura Naval Argentina, ocurrió el pasado 17 de marzo cuando, cerca de las 22.30, dos ciudadanos de nacionalidad china, que prestan tareas en un buque pesquero amarrado en el puerto marplatense y que habían regresado en taxi luego de cenar en el centro de la ciudad, fueron interceptados en el acceso a las Terminales II y III por tres sujetos a bordo de una camioneta Amarok color gris.
Según lo reconstruido por la fiscalía, los dos trabajadores pesqueros fueron forzados a subirse al vehículo ante la intimidación del uso de posibles armas de fuego. Mientras una de las víctimas fue bajada de inmediato, la otra quedó retenida en el vehículo con sus captores. Los hechos fueron registrados con claridad por cámaras de seguridad.
Alrededor de la 1 de la madrugada y después de haber estado circulando en la camioneta por vías desconocidas, el ciudadano chino fue liberado en el mismo sitio donde fue capturado, luego de que los ocupantes de la camioneta le dijeran que se habían equivocado de persona.
De acuerdo a la posterior investigación, no era la primera vez que los autores merodeaban la zona, ya que desde días atrás venían concurriendo al puerto en busca de un supuesto “amigo” y ante la negativa de pasar a áreas restringidas, ofrecían dinero y comentaban que la persona que buscaban tenía una deuda de 70.000 dólares con ellos.
La investigación dirigida por la fiscalía identificó a uno de los presuntos autores del hecho, que subía videos a redes sociales efectuando prácticas de tiro, con fajos termosellados de billetes y con el vehículo utilizado en el hecho. Este sospechoso es el ciudadano detenido.
fueron registrados con claridad por cámaras de seguridad.
La pesquisa también profundizó sobre una serie de encuentros que los acusados habían mantenido con dos efectivos de la PNA apostados a la seguridad de las terminales, tanto en días previos al hecho en las inmediaciones del puerto, como en días posteriores en otros lugares de la ciudad.
Según la fiscalía, se acreditó que el principal investigado les transfirió dinero antes del hecho y le dio un objeto a uno de los prefectos en días posteriores.
Antes de ser imputados y cuando fueron preguntados por el hecho en el que privaron de la libertad al trabajador chino, no aportaron la información relevante de la que disponían.